¿Quienes son vuestros arquitectos/diseñadores favoritos?
Intentamos no simplificar nuestros referentes. Nos gusta estar informados e intentamos analizar todas las tendencias y extraer lo que más se ajusta a nuestra forma de hacer y entender la arquitectura. Pero si tuviésemos que pensar algunos a los que volvemos con frecuencia, te diríamos Mendes
da Rocha con sus ventanas de la casa en Butanta, la cerámica de Jorn Utzon y casi todo de Fernando Higueras, pero en especial la integración de la vegetación. Nos gusta mezclar esas referencias con otras más contemporáneas y no necesariamente arquitectónicas, si no del mundo del arte o de la moda.
¿Cual fue vuestro recorrido profesional previo a la creación del estudio?
M:
Mis primeros años de formación fueron junto a Pachi Mangado en
Pamplona, posteriormente trabajé con Nieto y Sobejano en Berlín y
finalmente en Lacaton Vassal en París. A la vuelta, ya constituimos el
estudio.
L: Al acabar el proyecto de fin de carrera tuve la oportunidad de trabajar en distintos proyectos con María Lladó,cuya sensibilidad en el uso espacial del color es increíble y de la cual aprendí (y sigo aprendiendo) mucho de escenografía y decoración. Ya entonces empezamos a trabajar por las tardes en los proyectos que serían el germen del estudio.
¿Cual consideráis que fué el desafío más significativo durante la ejecución del proyecto y como lo resolvisteis?
Esta vivienda perteneciente a la antigua Colonia de la Unión Eléctrica fue construida en los años 60 y las sucesivas reformas a las que había sido sometida fueron modificando su distribución y materiales originales hasta dejarla prácticamente irreconocible. La labor principal de este proyecto fue rescatar y poner en valor todos aquellos elementos originales que habían sido ocultados y olvidados. Una de las mayores sorpresas fue descubrir que bajo una tarima de madera laminada y 2 capas de corcho se escondía un pavimento de falsa cerámica de Noia, técnica
artesana en desuso a día de hoy por su elevado coste.Decidimos conservar los restos de pavimento existente sin restaurarlo por completo, rellenando con un mortero el resto del suelo y dejando
entrever su composición original, influidos por los fascinantes dibujos
del Neues Museum de Chipperfield.
¿Como surgió la idea de añadir tanto color a la casa y cómo lograsteis que a pesar de ello no sature?
El color ya estaba ahí en suelos y vidrieras existentes, solo hubo que
rescatarlo y potenciarlo. Siguiendo esa premisa, el color se centró en
los suelos de baldosa y en resaltar elementos puntuales recuperados como la barandilla de la escalera. El resto de los elementos se dejaron en crudo.